Ensayos de homenaje en el primer centenario del nacimiento del filósofo español, que abordan diversos aspectos de la obra de Ortega. Los cuatro trabajos dibujan con rigor algunos de los horizontes centrales del quehacer filosófico hispánico en el mundo actual.
En Ave Negra, Elena Sada hace lo que nadie en la Legión de Cristo ha hecho: no sólo una descripción descarnada de lo que allí se vive cuando no hay público y se borran las sonrisas sostenidas con alfileres, obligatorias para los miembros cuando se enfrentan al mundo exterior, sino también un genuino mea culpa por las almas que a ella le tocaron en suerte como reclutadora estrella para el continente americano.