Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Tecleada a tumba abierta y con el corazón en un puño, para partirse de dolor y también de risa, Lolito es una maravilla escrita por el mejor, y más lírico, cronista de su generación. Un Holden Caulfield con conexión a internet, el reverso cruel de Wes Anderson y la mejor actualización de las novelas de los angry Young men. Elogiado por Nick Cave y aclamado por la crítica británica, nadie escribe como Ben Brooks, porque Ben Brooks, como Etgar, es único. Aunque comparte miedos con todos sus lectores.