El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Los Barbarismos despliegan un provocador repertorio de observaciones y sátiras sobre las urgencias de nuestro tiempo. En ocasiones reformulan conceptos clásicos desde una óptica radicalmente contemporánea, y en otras exploran términos recientes, como los referidos al mundo digital. Sus casi mil palabras renuevan la tradición del diccionario heterodoxo, explorada por Ambrose Bierce o Gustave Flaubert.