Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Este poema atípico hace referencia al ciclo mitológico tebano que comienza con Cadmo y termina con la muerte de Antígona, pasando por la tragedia de Edipo y sus consecuencias. Hay aquí una novela que es un poema o un poema que es una novela sobre la estirpe tebana y que somete el proceso escritural a la imaginación del autor y a los ojos de nuestro siglo. Los colmillos del dragón no constituye una galería de historias y sucesos envejecidos, enclaustrados en su gloriosa e infecunda antigüedad, sino que gozan y resultan verdaderamente actuales.