Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Pantagruel, rey de los dipsodas constituye la espléndida continuación de La extraordinaria vida del gran Gargantúa. Siguiendo el mismo tono paródico y sin perder su intención didáctica, Rabelais ofrece un soberbio fresco de la sociedad y la cultura de Francia y, por extensión, de Europa en la primera mitad del siglo XVI.