El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Tratar de comprender que la complejidad humana y sobre todo sus comportamientos en torno a la sexualidad son diversos sacudes todo lo instituido durante varios siglos, de ahí que la configuración sexo- genética nemónica actual constriña esa situación al limitar su expresión en dos cuerpos, sexos, géneros.