Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Todos saben que la colaboración es la clave para crear equipos y organizaciones de alto desempeño. En un entorno como el actual, globalizado y de alta competencia, mantener unidos los equipos en torno a las metas y operando bajo principios de ayuda mutua es vital. No obstante, esto no es sencillo, ya que la gente cree que los obstáculos para lograrlo están afuera, en otros departamentos, en otros compañeros de trabajo, en el mercado, en otras empresas; lo que demuestra este libro, a través de una sencilla historia, es que la forma de dejar atrás el trabajo aislado como los silos donde se almacenan granos comienza en un trabajo interno de cada una de las personas enfocado a crear una cultura organizacional de colaboración. Atrévase a romper las estructuras.