Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
La comprensión de la comunidad y la comunalidad como se han venido reconstruyendo y redefiniendo en muy distintos y distantes ámbitos a través de las luchas políticas de resistencia a la dominación liberal exige un pensamiento que autorice audacias proscritas por la ley del individualismo reinante. Un pensamiento que recupere y reactive los valores de lo común, o comunitario, o comunal otrora perforados por debajo de la línea de flotación por los tramas desastrosa de la historia y por los arduos debates en torno a sus oscuridades y por el control liberal de las redes narratológicas sancionadas. Un pensamiento que reconozca lo ganado y acepte lo sacrificado inútilmente, que legitime de nuevo lo comunitario y afile sus eficacias de modo que tengamos una nueva, más rica, multifacética y niveladora descripción de los sistemas sociales que habitamos hoy por hoy.