Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
En los problemas actuales de integración de minorías en países con un fuerte componente de emigración (España, Alemania, Inglaterra o los Estados Unidos), se vislumbra la influencia de las mujeres, pilares que mantienen las costumbres de los países de procedencia. En Identidad y Convivencia se debaten esos problemas a partir del mundo de las mujeres de las minorías religiosas en la Iberia medieval. El libro plantea un análisis de la convivencia bajo un prisma que no se había tenido en cuenta anteriormente, el del papel de las mujeres en las relaciones armónicas o difíciles entre las tres comunidades que ocupaban el solar hispano. Con la mirada en la Edad Media responde a un interés del presente tratar de descifrar las posibilidades de entendimiento entre grupos potencialmente enfrentados.