Críticos, teóricos y poetas han debatido desde distintos ángulos y perspectivas sobre el ser y el existir de la poesía, sobre su función social y humana, sin dejar de entrar en muchas ocasiones en un callejón sin salida. Parecer ser que poesía y reflexión sobre poesía son lenguajes equidistantes, pero no es así; existe un punto intersección, una curva en la que sus bordes dialogan siempre. Si bien es cierto que para ser un buen poeta no es una condición sine qua non ser un buen crítico de poesía, ni viceversa. Pero, al igual que la poesía, la poética también inquiere sobre el misterio de la vida y la condición humana.En México la lista de poetas críticos no es holgada. Desde la generación del Ateneo de la Juventud, específicamente con Alfonso Reyes, la actitud del poeta frente a su obra y frente a la obra de los demás empieza a ocupar un lugar importante. Sin embargo un cierto prejuicio o desdén han impedido que los poetas expresen su voluntad crítica. Con José Gorostiza, Octavio Paz, Alí Chumacero, Gabriel Zaid, José Emilio Pacheco, José Vicente Anaya, Ricardo Yáñez, Juan Domingo Argüelles, Eduardo Hurtado, entre otros, como referentes principales de nuestros poetas-críticos, los compiladores de este volumen de poéticas buscan consolidar un puente entre ellos y las nuevas generaciones de poetas de nuestra tradición literaria. En el día de hoy, cuando la creación y la reflexión no dejan de ser casi siempre separadas, resulta evidente que la crítica gana terreno dentro de la poesía. Esta selección de poéticas jóvenes es nuestra patente de este movimiento casi imperceptible pero luminoso.