El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
En La naturaleza de la memoria Erick Vázquez plantea preguntas sobre la angustia, la soledad, el desamparo que causa el tiempo, y más que todo, el amor y la belleza. A través de un juego epistolar, el autor ensaya sobre "una relación misteriosa, siempre expuesta como cualquier otro misterio, entre la edad, la memoria, la muerte y la amistad". El tiempo y la distancia, nos dice, son dimensiones que se tensan y flexionan en aquello que llamamos lazo afectivo. Esta postura, sustentada con un riquísimo ejercicio de relectura en el que dialogan lo mismo autores clásicos que contemporáneos, nos lleva hasta el límite entre los sentimientos y el "principio protector" de la creación artística por medio de una prosa ágil.