Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
A más de 30 años de la época en que Paul C. Kersey llevó a cabo su trabajo de campo en la comunidad indígena de Comachuén en la Meseta Purépecha, y con la valiosa colaboración de n grupo de reconocidos estudiosos de la cultura purépecha, aparece este testimonio en fotografías y textos. Basadas en un mucho más amplia colección de unas 1,300 fotografías tomadas entre 1983 y 1985, la obra presenta un "retrato vivo" de esta comunidad indígena tal y como era en aquellos años.