Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
La extraordinaria ilustradora y autora de libros para niños, Isol, nos entrega esta vez un libro objeto, una caja en cartón duro con entradas laterales donde se guardan 17 láminas de 15 x 16 cm, unidas y plegables. Las láminas están impresas por las dos caras. En una serie nos cuenta la historia de un niño que se encuentra un patito y narra todas las cosas para las que le es útil. En la otra cara es el patito el que cuenta que un niño lo encontró y todas las cosas y vivencias que comparte con su compañero.