Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
En el quinto centenario de la muerte del Bosco, Siruela publica este ensayo profusamente ilustrado del escritor e hispanista Cees Nooteboom.
En plena polémica por la autoría de algunas de las obras catalogadas del pintor, Cees Nooteboom nos invita a repasar las pinturas del genial neerlandés a través de los recuerdos que el escritor ha ido atesorando en los últimos sesenta años. La importancia del pintor en la memoria de Nooteboom es notable, como demuestran los viajes que realizó para conocer y estudiar siete de sus pinturas en Lisboa, Madrid, Gante, Róterdam y Bolduque, la ciudad holandesa donde El Bosco vivió y trabajó. Esta obra literaria está profusamente ilustrada con detalles tomados de las pinturas del Bosco e incluye también siete obras completas.