Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
El presente título es un catálogo experimental de formas métricas, algunas innovadoras y otras sancionadas por el uso. Es un libro en el que predomina la rima, pero en el que también tienen cabida formas puramente métricas, tales como la tanka y el haikú, según han sido interpretadas en la tradición hispánica. Otros, sí, prevalecen la rima constante y los metros mayores: los octosílabos asonantados, verbigracia, están completamente ausentes de sus páginas, acaso esperando turno en un próximo libro. La décima y el soneto constituyen la columna vertebral de este volumen, aunque las formas populares y las japonesas llegan a abarcar más de la mitad de sus páginas. Clausura el libro un ambicioso intento de traducción de la célebre "Sextina de una cantina" de Malcolm Lowry, utilizando por primera vez en español el recurso de las palabras-rima, intrínseca a esta forma de origen provenzal. Museo de grima e insomnio es un título que recuerda la musicalidad de la lengua, sus ritmos y que enterará a los lectores sobre la diversidad de metros en que podemos expresarnos; un libro importante porque ayuda al lector a entender su lengua y, en esa medida a enriquecerla.