Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Colorido e integrante, la primera novela de Alfredo Núñez Lanz nos cuenta la historia de la devoción a un Cristo rescatado del incendio de una iglesia, el Señor de las Llamas, al que la feligresía va trasladando de casa en casa para protejerlo. Pero sobre todo, esta novela es una historia de amor, de una necesidad de posesión desgarrada y sin esperanza, en el doloroso y contradictorio silencio impuesto a quienes sufrían por el amor que aún no se osaba decir su nombre. Poblada de matices, olores y sabores que nos trasladan a aquellos años turbulentos, une con mucha solvencia y sin concesiones lo político y lo personal: el amor en los tiempos de la guerra, esa historia paralela que nadie contará.