Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Durante los últimos veinticinco años un buen número de poetas, narradores, dramaturgos, ensayistas han enriquecido y transformado nuestra tradición literaria. Se trata de escritores originales y activos, cuyas obras -parte fundamental del panorama de las letras mexicanas- merecen ser más leídas y conocidas. La colección La Centena, en sus vertientes de narrativa, poesía, teatro y ensayo, está dedicada a recuperar esas obras significativas y a valorar a sus autores.Origami para un día de lluvia se publicó por primera vez en 1990. Anteriormente, Manuel Ulacia (1953-2001) ya había publicado dos libros de poesía: La materia como ofrenda en 1980, editado por la UNAM y El río y la piedra en 1989, en Pretextos. También es autor de Luis Cernuda: escritura, cuerpo y deseo, publicado en Editorial Laia, 1986; El árbol milenario y El plato azul aparecieron en 1999. Es coautor de La sirena en el espejo: antología de nueva poesía mexicana, editado por El Tucán de Virginia en 1990.