Francisco es conserje en una escuela rural de Villahermosa, Tabasco, y en su tiempo libre hace trabajos de plomería para sobrellevar su precaria situación económica. Lo paradójico es que Francisco también es el dueño de una empresa privada que ganó un contrato por 500 millones de pesos. Ésta es una de las estrategias que PEMEX, SEDESOL y la SEP, entre otras dependencias de gobierno involucradas en este fraude monumental, han utilizado para desviar más de 7 000 millones de pesos desde 2010.