Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Con La puerta giratoria, Jorge Valdés Díaz-Vélez (1955) ganó el Premio Nacional de Poesía de Aguascalientes en 1998. De su obra destacan Voz temporal (1985), Cuerpo Cierto (1995), Jardines sumergidos (2003) y Cámara negra (2005), además de formar parte de numerosas antologías de poesía hispanoamericana. Es miembro de carrera del Servicio Exterior Mexicano; actualmente se desempeña como director del Instituto de México y consejero cultural en España.