Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
La enfermedad del amor La obsesión erótica en la historia de la medicina
La enfermedad del amor es un organismo literario: un museo de anormalidades y relatos de todas las épocas, ante la figura del médico que sólo puede ver a medias la estructura lógica del problema. La enfermedad del amor, de Francisco González Crussi, se detiene en los puntos ciegos de las teorías científicas, en el remolino donde la medicina y la vida no logran diferenciarse, a la vez que conduce a una discusión sobre la naturaleza patológica de la obsesión erótica. La enfermedad del amor es, entre muchas otras cosas, un museo de aforismos sobre la dimensión erótica de nuestras vidas, y sus casi infinitos reductos hacia la humillación, el fracaso y otros tormentos, pues el amor es "el fenómeno más discutido y menos comprendido", según Diderot, "la ocupación de las gentes ociosas", de acuerdo con Diógenes, y en la versión de Platón se trata de "la enfermedad de las mentes desocupadas". La enfermedad del amor es un organismo literario poblado por grandes pensadores, arrinconados en los límites de la racionalidad: un museo de anormalidades y relatos de todas las épocas, donde se distingue el triángulo malsano conformado por los hechos del cuerpo y su contradicción con la cultura, ante la figura del médico que sólo puede ver a medias la estructura lógica del problema. Sin pasión por la denuncia o el escándalo, sin necesidad de redimir a nadie, González-Crussí contempla con ironía y serenidad los acontecimientos confusos de la historia, y los enlaza para formar una trama, sin resolución, pero terriblemente entretenida, que conduce a una discusión final acerca de la naturaleza patológica de la obsesión erótica, puesta en escena mediante el recurso de una ficción filosófica, donde los argumentos se tensan y alternan para generar una resolución coherente, pero inesperada, un estado de conciencia donde la literatura y la medicina contemplan el horizonte humano que diagnosticó,en su momento, Francisco de Quevedo: la enfermedad que crece si es curada. -Del prólogo de Jesús Ramírez-Bermúdez-
"En el año 2012, el Museo del Palacio de Bellas Artes de México presentó una exposición de los primeros 25 años de mi pintura y escultura. Al hacer la investigación para esta exposición con la ayuda de la curadora y el equipo del museo, indagamos dónde fueron a dar varias de mis obras de antaño. Un día, empeñado en la búsqueda encontré en mi estudio unas seis cajas con dibujos de los años sesenta y setenta, enterradas debajo de una pila de carpetas viejas, cartones y objetos escacharrados. No me acordaba en lo absoluto de ellos: su existencia estaba borrada de mi mente. Eran unos 220 dibujos, de los cuales hice una selección de unos 140 para este libro. Este hallazgo me provocó un recuerdo vivo de mis primeros años en México cuando dibujaba día y noche, cuando la ciudad era más pequeña, cuando el ambiente era mucho más divertido y éramos exuberantes jóvenes y con gran brío. Para mí, estos dibujos reflejan el ojo con que yo veía el mundo en esa época, una amalgama del humor agudo, subversivo de Inglaterra, mi país natal, impregnada con el punzante y juguetón humor mexicano. Dibujar es un instinto. Debe haber un chip en nuestro ADN que hace que todos los niños del mundo dibujen por intuición, y lo hacen de maravilla y lo asombroso es que todos dibujan de la misma manera, sin importar su cultura u origen". Brian Nissen. Farándula ofrece la posibilidad de acercarnos a obras poco conocidas del artista plástico Brian Nissen, las que interpretan en cierto modo la manera en que él interpretaba el mundo en los años sesenta y setenta, hecho que permite a los lectores conocer más de cerca su obra.