Magnus Bane y Alec Lightwood tienen una buena vida. Viven juntos en un espectacular loft con su
hijo Max, un pequeño brujo que está aprendiendo a caminar, y las calles de Nueva York están
tranquilas Todo lo tranquilas que pueden estar, claro.
Hasta la noche en la que dos viejos conocidos irrumpen en su apartamento para robar el poderoso
Libro de lo blanco. Ahora, Magnus y Alec tendrán que dejarlo todo para ir a recuperarlo. Tienen
que seguir a los ladrones hasta Shanghái, pero necesitan refuerzos y una canguro.