El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Este es el único libro de cuentos que escribió como tal Jorge Ibargüengoitia, aunque más bien se trata de una serie de ficciones sobre un fondo autobiográfico. Como el resto de su obra narrativa, en La ley de Herodes el autor exige al lector su total complicidad, y como justo premio le otorga el inigualable regocijo de experimentar con el protagonista un merecido desquite o una maliciosa venganza, sin piedad, sin misericordia y eso sí, con excesivo sarcasmo.