Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Como una compleja maquinaria, en Anticitera, artefacto dentado, de Aura García Junco, se eslabonan las narraciones de aparatos que leen los astros, vapores hirvientes, manuscritos secretos e inventores enloquecidos, para crear una atmósfera mágica y misteriosa. A partir de la configuración de una ficción consciente y honesta, como ya se anuncia desde el epígrafe que abre la novela, el lector se adentra en un universo imaginativo con reminiscencias a las leyendas antiguas y los referentes clásicos.
Para acercarse a la presente novela, no hace falta ser alquimista ni pionero de la técnica y la ciencia, ni tampoco anticipar las posiciones astronómicas, pero sí tener una mente abierta.