Sinopsis
Nacido en Guadalajara, Jalisco en 1907, hijo del ingeniero Manuel de la Mora, destacado profesional de finales del siglo XIX y principios del XX en ese estado, Enrique de la Mora y Palomar fue el primero y uno de los máximos renovadores de la arquitectura religiosa en México, además de creador de algunos de los edificios más notables del México del siglo XX cuyas obras singulares pautaron la fisionomía arquitectónica y urbana de México. Formó parte de la generación de Enrique Yáñez, Augusto Pérez Palacios y José Creixell. Destacado docente, impartió clases en la UNAM, fue uno de los fundadores de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura del Instituto Politécnico Nacional y profesor de proyectos de las primeras generaciones de alumnos de la Universidad Iberoamericana. El título Enrique de la Mora y Palomar. Ideas, procesos, obras reúne tres marcos de De la Mora divididos en tres tiempos: ideas; que muestra los dibujos como primera representación de los proyectos; procesos, y obras, estos últimos con fotografías que revelan el desarrollo de los procesos constructivos hasta la obra terminada. También cuenta con una línea temporal que reúne proyectos de este arquitecto de 1933 a 1976, ilustrado con croquis, acuarelas, planos, perspectivas y fotografías de sus obras más destacadas en el periodo. El conjunto del volumen conforma una revisión historiográfica sobre un arquitecto que se desprendió de la idea del genio único y expresó hábilmente las inquietudes de la época moderna, un creador fundamental para la arquitectura del siglo XX en México. El volumen muestra el pensamiento y reseña la vida de un personaje que se rodeó de notables artistas, políticos, empresarios, ingenieros y religiosos, quienes influyeron en su pensamiento colaboraron con él, como Félix Candela, José Villagrán García, Leonardo Zeevaert, José Aspiazu y Salvador López Peimbert, entre otros. En palabras del también arquitecto Alberto González Pozo, Enrique de la Mora, conocido también como El Pelón, fue ?un creador generoso y alegre que nunca se preocupó por reunir y publicar sus obras, y cuya labor, por consiguiente, nunca ha sido suficientemente aquilatada?. En este sentido, el título publicado por Arquine resulta necesario porque rescata y difunde las ideas y las obras de un arquitecto cuyo trabajo resultó determinante en la construcción y la conformación de la imagen del México contemporáneo.