Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Torres García estuvo lejos de ser un provinciano. Se movió en los ambientes de ciudades tan cosmopolitas como París o Nueva York, aunque quizá -como observó Tomás Llorens- llegara demasiado tarde a la gran metrópolis francesa y excesivamente pronto a la estadounidense. Y su existencia empezó y terminó en la capital uruguaya, Montevideo.