El libro narra, mediante capítulos profusamente ilustrados con fotografías de la época, recortes periodísticos, publicidad e imágenes actuales salidas de la lente del fotógrafo contemporáneo, incisos que corresponden a calles y zonas clásicas para la compra de libros de segunda mano como la Lagunilla, avenida Hidalgo, Donceles, Álvaro Obregón y Miguel Ángel de Quevedo, entre otras. Además incluye tres mapas que permiten ubicar dónde estuvieron y todavía se encuentran las librerías de viejo que han marcado parte de la historia ignorada del consumo metropolitano de libros.