En 1797 aaprecio en Holanda La nueva Justine o las desgracias de la virtud, seguida de la historia de Juliette, su hermana, Escrita por Donatien Alphonse Frocoise de Sade, esta monumental obra horrorizo al mundo como ninguna otra historia de la literatrura.
¿Acaso Simón Tanner no vagabundea, nadando en la felicidad, para no producir nada, a no ser el goce del lector? Franz Kafka Cuando el poeta Christian Morgenstern leyó Los hermanos Tanner, la primera novela de Robert Walser, la recomendó a su editor con las siguientes palabras Este hombre hablará así mientras viva y sus libros serán un extraño y fascinante espejo de la vida. Al igual que en El ayudante y en Jakob von Gunten, sus otras dos grandes obras, la excepcional intensidad del autor suizo queda perfectamente plasmada en este trabajo de un novelista admirado en su tiempo por Kafka, Hesse o Musil y que hoy sigue siendo una referencia obligada en la narrativa europea del siglo XX.