El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Poco importa que Gévaudan e Irlanda sean los escenarios donde
se representan estos dramas breves. Lo que importa es que
con el mundo se hagan países y lenguas; con el caos, sentido;
con las praderas, campos de batalla; con nuestros comunes,
nombre propio. Qué mejor aliciente que las palabras del propio
Michon para introducir a los lectores en los relatos recogidos en
este volumen; Mitologías de invierno, El emperador de Occidente,
El rey del bosque y Abades están habitados por personajes evocadores,
cuyas vicisitudes transcurren en exuberantes escenarios.
A través de su característica prosa lírica y rica en imaginería, el
genio francés aborda cuestiones tan ecuménicas como el poder,
la muerte, la belleza o el arte.