Leer la poesía de Pita Amor (1918-2000) resulta un viaje interno sorprendente. Más allá de la imagen social, de la persona pública inmersa en la vida cultural mexicana, está la obra de una escritora íntima, que busca explicar el universo (y a ella misma) por medio de la palabra. Reflexiones, meditaciones, décimas dedicadas al ser divino, en estos poemas se encuentra una búsqueda literaria que supera, por muchos, la huella dejada por la persona pública: una serie de mensajes íntimos, muy humanos, donde la autoría se declara alma sufriente, perdida, pero finalmente viva y agradecida por la existencia. Este volumen reúne la mejor poesía de Pita Amor: Yo soy mi casa.