Por forma social ha de entenderse el vínculo entre humanos mediados por los lenguajes históricamente determinados. Así, los cuerpos se convierten en portadores de relaciones sociales procesuales y condensadas en diversas prácticas e instituciones. Esto resultará especialmente importante para analizar procesos de violencia social transversal, forma peculiarmente dramática de somatización de patologías sociales
Libros relacionados
MODERNIDAD PRODUCTIVA Y SINDICATOS EN MÉXICO: 1983-2010