Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
En 1755, la Enciclopedia arrojaba una o a la basura: lo que hasta ese entonces se había llamado, en francés, oeconomie (oikonomía) se convierte en économie economía. Al perder la o, la economía va perdiendo progresivamente la memoria de su sentido original (oikos, casa, nomos, ley), y se independiza de la gestión del resto de la sociedad, hasta el punto de presentar las leyes que enuncia como si fueran leyes naturales a las que sólo podemos suscribir.