Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
En 1996, mediante numerosas ceremonias y actos alusivos, se conmemoró el primer centenario de la vida cinematográfica mexicana. El libro Luz y sobra. Los inicios del cine en la prensa de la ciudad de México bien puede incluirse en tan afortunada celebración.Coordinado por Felipe Garrido, Luz y sombra reúne con amplitud y esmero las vicisitudes que corrió el séptimo arte en nuestra metrópoli a principios de siglo; las reacciones de asombro, curiosidad y entusiasmo de unos, de temor e indignación de otros, registradas en numerosas reseñas periodísticas escritas por plumas tan prestigiadas como las de Luis G. Urbina, Amado Nervo, Alfonso Reyes, Martín Luis Guzmán, entre otras.