El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Ted: apuesto, listo, carismático, cariñoso. Liz: una madre soltera, precavida, pero enamorada. Una imagen de felicidad doméstica, los dos parecen tenerlo todo descifrado. Eso es hasta que Ted es arrestado y acusado de una serie de horripilantes asesinatos.