El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
El libro sobresale por la gran cantidad de informacion relevante que enriquece nuestro conocimiento del arte y de la historia. Aborda un tema original e interesante, exponiendo la importancia que ha tenido el preservar, compartir y transmitir el conocimiento y la cultura, evitando con ello el regreo a la ignorancia. Ahonda en la figura del Mecenas presentandolo bajo un concepto que va más allá de quien aporta o regala dinero, integrando a su definición a todos aquellos quienes han albergado el propósito de enriqueser a la humanidad, trabajado hacia ese objetivo.