Sinopsis
Si, como dijo Carlos Fuentes, el relato se constituye en oposición a la muerte, en esta novela de Leila Driben la narración se produce como una "renuencia al olvido". La ficcionalización de la memoria es imprescindible en Donde ellos vivían, recuperando escenas del pasado y de la ausencia. Así, recorre morosamente los espacios de la infancia: una colonia judía en medio de la pampa, la casa paterna, los sitios misteriosos de aquella vivienda, los juegos, las fantasías, el tenue descubrimiento del erotismo, los vínculos truncos, dolorosos y contradictorios con los padres, y, cerrando el círculo, la última visita a las ruinas de lo que fue la aldea. En ese periplo narrativo, la memoria surge múltiple como un prisma: a veces desmayada, débil, adentrada en los límites de sí misma y en extraña dialéctica con el vacío; a veces sutil y placentera; a veces dolorosa o desesperanzada y, casi siempre, melancólica. La memoria no oculta, en esta novela, que habla "de lo que ya no es". A su vez, la escritura densa, ondulante, oscilatoria, urdida, suave y que mantiene una inquietante relación con la nada. Definitivamente Donde ellos vivían, sin duda que a conciencia, propone que la memoria y la escriturasean sus verdaderos protagonistas.