Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
El Centro de Capacitación Cinematográfica festeja su vigesimoquinto aniversario, en los momentos en que fue fundada la escuela, con el repentino y no muy seguro auge del cine nacional de los años setenta, existía la necesidad de formar profesionales capacitados, más allá de la práctica de hacer peliculas dentro de la industria, para enfrentar los retos que este nuevo cine proponía. Como las escuelas no se limitan a ser aulas y planes de estudio, sino que se forman fundamentalmente con profesores, alumnos y trabajadores, la historia o las historias, que se encuentran en este libro colectivo surgen de los testimonios de muchos de quienes participaron y participan en la actividad de esta escuela.