Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Durante años el teatro para niños ha sido una de las asignaturas más pendientes del teatro mexicano. En esta edición de La Centena encontramos dos obras de Maribel Carrasco, una de las autoras más serias y consistentes que se han acercado, tanto en la escritura como en la puesta en escena, al universo de los niños. Carrasco, como en otros de sus textos, enfrenta a los niños con problemas reales por medio de un lenguaje fino, delicado, humorístico y pleno de inteligencia. Como homenaje a la ópera, La venganza del gato Boris es un viaje musical que abre la imaginación y la posibilidad del gran espectáculo y también una reflexión sobre la amistad y la traición. Mientras que Morritz y el pequeño Mons, de manera por demás ingeniosa, nos introduce con novedad en uno de los temas recurrentes de los niños: el miedo, la oscuridad y sus enigmas, la pipí como sucedáneo de la parálisis nocturna ante el terror que causa cruzar el umbral de la puerta y el corredor sin luz. Ambas obras nacen de preocupaciones que tienen los niños reales y retratan parte de su mundo y de su imaginación. Aquí hay algo más que buen teatro para niños hay, simplemente, buen teatro.
Libros relacionados
Tremendas aventuras de la Capitana Gazpacho o de cómo los elefantes...