Alfonso Reyes dijo de Goethe que si pecó por algo fue por querer aplicarlo todo al alcance de los sentidos, negándose a la mano oscura de la matemática o a las abstracciones filosóficas, y agregó: "nunca quiso pensar en el pensamiento, sino sólo en las cosas". Con su jugosa exposición, Alfonso Reyes nos pinta la existencia, obra y contorno del genio creador de Fausto.
Esta es la historia de un hombre de casi cincuenta años, cansado, pesimista, introvertido, enfermo del cuerpo y del espíritu; extraño, insociable, misterioso, pero talentoso y con una capacidad de sufrimiento ilimitada, con vicios y virtudes, castigado por dolorosas experiencias vividas que lo hacen sentir desubicado en el mundo material circundante.