Marc Slonim proporciona una admiorable introducción pqara los que se inician por los caminos de la novela, el cuento, el teato y la poesÃa rusos y un recordatorio vivificante para los viejos entusiastas de la gran riqueza de esta literatura y de sus más altos representantes.
José Zorrilla vivió en México entre enero de 1855 y junio de 1866. A lo largo de esos once años -que abarcan el último periodo de Santa Anna en el poder, la Guerra de Reforma, la invasión extranjera y la instauración del imperio de Maximiliano -el célebre autor de Don Juan Tenorio fue trabajando una relación cada vez más compleja en lo político y en lo emocional con su país adoptivo.Las impresiones de su estancia entre nosotros, junto con muchos otros episodios de la vida del poeta, fueron recogidas en Recuerdos del tiempo viejo, su autobiografía publicada entre 1880 y 1882. Hacía falta, para el público interesado en la historia nacional, una edición como ésta, de Pablo Mora, en la que se concentran y organizan las Memorias del tiempo mexicano que José Zorrilla evoca en una prosa sorprendentemente moderna.