Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Monterrey es una ciudad que siempre ha tratado de ocultar parte de su rostro, como aquellas mujeres que maquillan una cicatriz o la cubren con un peinado extravagante para que nadie la vea, todos los días nuestra urbe tiende un vuelo de pudor para alejar de la mirada de los curiosos lo que, a su criterio de provinciana vieja, debe permanecer ignorado: la violencia que late tras los muros de las casas o en las calles solitarias, el comercio carnal indiscriminado, la muerte que ascha a sus habitantes detrás de cada puerta, el homosexualismo presente desde el primero hasta el último de los escalones en la pirámide social, las ambiciones insanas, la drogadicción, la marginalidad.