Durante la décadas del cuarenta al sesenta del siglo xx, se desarrolló en México lo que hemos denominado una segunda modernidad referida a la arquitectura y el urbanismo. Se trata de un espacio temporal en el cual sobre las bases del movimiento moderno y el auge económico no vivido en el país, conocido como el desarrollo estabilizador, se construyó una nueva arquitectura y una ciudad favorecedora de un más alto nivel de bienestar