El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
El hartazgo de la vida en pareja, el placer de la venganza, los recuerdos de la infancia, el desaliento en la vejez, los demonios de la infidelidad, la crudeza del divorcio, la frustrante.