Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Este segundo tomo de Lecturas de Poesía Clásica quiere dar cuenta del milenio que terminó en el que nacieron y se expandieron las lenguas de Occidente: alemán, catalán, español, francés, inglés, italiano, portugués, ruso, y las literaturas que las expresan. Aquí se reúnen algunos de los poemas más representativos que se han escrito en esas lenguas en ese vasto periodo. Se trata de aproximar a quien se acerque a sus páginas al disfrute de algunos ejemplos de la poesía de cada autor cuya obra se ha considerado importante o significativa. El propósito esencial ha sido interesar al lector y estimular su curiosidad para un estudio más profundo.