Blaise Pascal (1623-1662) hombre de su tiempo, concilió el estilo del pensamiento directo con el arte de una retorica persuasiva, que empleaba a un tiempo la paradoja, el asombro y la sorpresa. Esta caracterÃstica estarÃa presente por igual en los dos objetos de su estudio: las ciencias fÃsicas y la antropológica cristiana.
En esta obra el autor realiza preguntas como ¿Acaso tienen las artes un origen común?, ¿Hay correspondencias entre la danza y la pintura?, por lo que plantea que el origen de las artes puede ser un tipo de relación de nuestra especie con el mundo, un momento fundacional, complejo y trascendente, al que llama embriaguez. Las artes vendrían siendo, entonces, variaciones sobre esa embriaguez fundamental; las artes no son el tema principal de esta libro, son su esencia.