Elemento indispensable en la formación de toda persona culta sigue siendo hoy el conocimiento de las letras clásicas. El autor traza aquà un panorama de la literatura latina sin omitir nada esencial y dando una clara idea de las figuras y corrientes.
Con una franqueza descarnada, Crispín escribe una mordaz oposición al feminismo contemporáneo. ¿Piensas que las mujeres son seres humanos y que merecen ser tratadas como tales? ¿Qué las mujeres merecen los mismos derechos y libertades que los hombres? Si es así, entonces eres feminista o eso dicen las feministas. Pero en algún lugar del camino, el movimiento para la liberación de las mujeres sacrificó su significado en pos de la aceptación, y nos dejó con una pose banal, educada e inútil que apenas desafía al status quo. En este fiero e inteligentísimo manifiesto, Jessa Crispín pide más.