Roland Barthes se propone descubrir una estructura en la existencia de Jules Michelet, es decir, desenmarañar la red de las obsesiones del historiador clásico francés, autor de obras ahora imprescindibles como Historia de Francia, La bruja, El pueblo, El insecto, entre muchas otras.En esa red de obsesiones de Michelet han quedado atrapados temas esenciales del devenir humano y del pensamiento, como la mujer, el sexo y el amor; la justicia, el pueblo y la revolución; la muerte y el sueño; la religión y la sangre, etcétera, pero dichos temas no son asumidos en forma abstracta por el historiador y su crítico, sino como florecimientos o pasiones en la vida y en la historia. Roland Barthes ha tejido también una red en esta obra y los fragmentos que recoge de Michelet logran componer de manera cabal el verdadero rostro del historiador.El riguroso método de Barthes hace de Michelet una auténtica creación que nos lleva apasionadamente al conocimiento profundo, en este caso de las ideas fijas que se apoderaron del espíritu de un gran historiador.
Si el lector desea saber cómo llueven las palabras en la literatura, qué entiende Fernando del Paso por novela histórica, cuáles son los temas que le parecen novelables, a quién se refiere cuando habla de solitarios animales abandonados por los dioses, qué cosas no han cambiado en México en al menos dos siglos, qué opina de sus propias novelas (y de las de Carlos Fuentes y Juan Rulfo, entre otros escritores), pero sobre todo dónde sugiere que hay que poner el corazón, el amor, el entusiasmo y el verbo a la hora de escribir, sin duda disfrutará esta colección de textos de uno de los mejores escritores de la lengua castellana, que en conjunto retratan algunas de sus obsesiones, aportaciones y convicciones en torno al mundo de la novela y al de la gran literatura.