En 1797 aaprecio en Holanda La nueva Justine o las desgracias de la virtud, seguida de la historia de Juliette, su hermana, Escrita por Donatien Alphonse Frocoise de Sade, esta monumental obra horrorizo al mundo como ninguna otra historia de la literatrura.
El método de Marx se había instituido ya que era el método dialéctico. Ya no se trataba, pues, de saber lo que decía Marx en este inesperado texto, sino de que Marx tenía que decir lo que decía el marxismo; aunque fuera con calzador, sus palabras tenían que encajar con los postulados del materialismo dialéctico y del materialismo histórico. Pero el problema es que el texto no se dejaba acoplar tan fácilmente.