Ensayos de homenaje en el primer centenario del nacimiento del filósofo español, que abordan diversos aspectos de la obra de Ortega. Los cuatro trabajos dibujan con rigor algunos de los horizontes centrales del quehacer filosófico hispánico en el mundo actual.
Este libro es producto de una convivencia de seis meses en Inglaterra y de un reencuentro de una semana en Polonia, tiempos en los que se estableció una amistad que permitió al autor de este libro y al personaje del mismo, Ryszard Kapuscinski, una relación cotidiana en la que afloraron los recuerdos y las confidencias en un escenario para ambos extraño.