Ensayos de homenaje en el primer centenario del nacimiento del filósofo español, que abordan diversos aspectos de la obra de Ortega. Los cuatro trabajos dibujan con rigor algunos de los horizontes centrales del quehacer filosófico hispánico en el mundo actual.
La obra reúne una colección de ensayos que tienen la intención de aproximar al lector a la obra gráfica que Toledo realizó entre 1959 y 1972, para ello la autora poeta y ensayista recurre a una prosa fluida y admirable, llena de imágenes y sensibilidad, en la que también aparecen reflexiones sobre otros pintores (desde el Bosco hasta Antonio Ruiz).