El autor sostiene que la economÃa y la literatura tienen puntos de contacto y para demostrarlo aborda los siguientes temas: el origen histórico de la filosofÃa y del dinero acuñado, asà como la postulación bivalente que afirma que las palabras señalan cosas concretas y que el dinero implica la posibilidad de obtener bienes si aceptamos que la literatura es valorable.
Con miles de millones de años de ser testigo de la vida en la Tierra, de ver a cien mil millones de humanos en su vida cotidiana, de sentirse increíblemente sola y de escuchar su propia historia contada por otros, a la Vía Láctea (con sus cien mil millones de estrellas y cincuenta undecillones de toneladas de gas) le gustaría hablar por sí misma.